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2005-08-15

La tierra del millon de elefantes

Volvemos a la carga con la cosa que se alarga (Unai dixit)

Lo primero mandar desde aqui muchos saludos a esos viajeros de Dios que nos encontramos en latitudes extranas: Juanjo y Gema de Madrid. Joan y marga de Palma y Karin y Gabriella de Alemania. Lo segundo aclarar al amese McGuffin que en Vietnam escriben usando el alfabeto latino pero que en Laos, donde nos encontramos ahora, escribe en un sindios que no entenderia ni un Champoillon puesto con anfetas.

Efectivamente, os dejamos la ultima vez en Vietnam y ahora ya estamos en Laos. Y vaya diferencia!! Todo aqui es tranquilidad paz y sosiego. Con deciros que he visto estaciones de autobuses en pueblos perdidos de Albacete mas concurridos que el aeropuerto internacional de Vientiane.

Estamos ahora mismo en Luang Prabang que es mas o menos donde Cristo perdio la cruz. Es una ciudad, casi pueblo, precioso que figura entre los lugares Patrimonio de la Humanidad de la Unesco. Rodeados de jungla impenetrable, en la confluencia del rio Mekong y un afluente, la ciudad se extiende sobre una peninsula en la que hay decenas de templos budistas a cual mas impresionante. Los templos, obvia decirlo, estan llenos de monjes y ahora mismo, en el Cyber donde os escribo hay uno dale que te pego conectado a la red (los tiempos ya no son los que eran...).

Luang Prabang ademas, tiene toda una coleccion de arquitectura colonial envidiable y eso junto con lo tranquilo que es y lo barato que resulta no es de extranar que sea devorado por los turistas en cinco anos. Por la tarde noche se pone un mercado al aire libre lleno de telas, ropa, bolsos, objetos de papel y decorativos que hacen que se nos caiga el alma a los pies al no poder llevarnoslo todo.

Ayer nos dimos un homenaje y nos fuimos a cenar al mejor restaurante de la ciudad. De esos sitios de lujo asiatico que da hasta verguenza entrar en camiseta. Pues bueno, alli por 16 miseros dolares nos zampamos una cena de lujo que ni en mis mejores suenos podria yo pensar. La verdad es que te sientes un poco 'amo blanco' pero bueno, tambien se que lo que les estoy pagando es para ellos un dineral asi que todos tan contentos.

Esta manana hemos atravesado en barca el Mekong despues de transitar por unos caminos embarrados en los que la fregoneta ha quedado encallada un buen rato. En la otra orilla de este rio que es casi como un mar hemos visitado una cueva llena de estatuas de Buda.

Ahora empieza a apretar el calor y es probabel que caiga la tipica lluvia monzonica asi que aprovecharemos para pasarnos por el hotel, ducharnos y tirarnos un rato a la bartola.

Cambio y corto.